Por: Lic. Héctor Armando Rodríguez Rosario, analista político
El fenómeno de popularidad que ha desatado la candidatura de Héctor Rodríguez Pimentel en la provincia de Montecristi no tiene comparación en los últimos tiempos de la actividad política en esa demarcacióm fronteriza. Su accionar político le suma adeptos y simpatizantes de todas las corrientes políticas, incluyendo en el partido oficial donde se debaten desde las pasadas primarias una lucha encarnizada que parece no tener fin.
Cuando fue senador de Montecristi en el período 1990-1994 Rodríguez Pimentel tuvo la oportunidad de desarrollar una prolífica obra en favor de su provincia que incluyó diversas áreas como turismo, educación, agricultura, salud y cultura. Fue el autor de la declaratoria de quinto Polo Turístico de Montecristi en 1993, durante el gobierno del doctor Joaquín Balaguer, y quien auspició decenas de becas para estudiantes de escasos recursos.
Se recuerdan los proyectos habitacionales que Pimentel ejecutó en Montecristi, Villa Vásquez, Loma de Castañuelas, Palo Verde, Gozuela y las Matas de Santa Cruz, así como los proyectos de electrificación rural en Los Bateyes, Carnero, La Pinta, Piloto y La Caida en el municipio Guayubín.
Actualmente Pimentel incursiona en la inversión en el área turística en Montecristi para atraer visitantes nacionales y extranjero a disfrutar de las bellezas naturales y de las bellas playas de esta histórica provincia. Asimismo ejerce el papel de vocero de las causas de su provincia, como lo ha hecho para que se construyan los sistemas cloacales de Villa Vásquez y Montecristi, así como la lucha que ha llevado a cabo en favor de que los municipios sean dotados de ambulancias y de que sea construido el hospital de Villa Vásquez.
De acuerdo a estudios de opinión los electores quieren un cambio en Montecristi, y eso es lo que ha prometido Rodríguez Pimentel en su campaña, quien representará en la boleta electoral a seis partidos de oposición encabezados por el Partido Reformista y la Fuerza del Pueblo.
Su citada obra y su accionar durante la presente campaña con los jóvenes y los sectores sociales y económicos organizados, han reforzado la convicción colectiva de que sólo con Rodríguez Pimentel puede Montecristi lograr el cambio de senador que tanto anhela para su progreso.
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